Abstract [en]

This article analyzes art as a political phenomenon, and how this form of expression has the power to affect people’s perceptions of the speech, the power of the media and activism. In order to achieve this, the research will focus on Ai WeiWei’s work. The purpose of this article is to show how art could relate to ideas of revolution, in the case of schools in Sichuan, which inspired multiple artworks such as Remembering, Sunflower seeds, the documental Never sorry, and the campaign Remembrance and the humanitarian movement, which Weiwei has been involved lately. This article is composed of three parts. The first part a brief introduction to Ai WeiWei and how his art has been seen as a form of political expression. The second part is centered Sichuan earthquake and the art involving it, furthermore how Ai WeiWei committed himself to the actual situation trough community art and activism, the final part presents the findings.

Key Words: Activisms, art as political phenomenon, humanitarian crisis.

 

Resumen [es]:

Este artículo pretende analizar el arte como fenómeno político, en el caso específico de Ai WeiWei y el cómo esto afecta la percepción de la población en aspectos tales como: el discurso, el poder de los medios de comunicación, y el activismo a través del arte. El propósito de este artículo es mostrar como el arte se relaciona con ideas de revolución, analizando en el caso de las escuelas en Sichuan, que tuvo múltiples trabajos de arte, tales como Remembering, Sunflower seeds, el documental Never Sorry, y la campaña Remembrance; además del movimiento actual de inmigrantes como forma de activismo y expresión de la crisis humanitaria. Este artículo se compone de tres partes, en la primera se presenta, una breve introducción sobre quién es Ai WeiWei y cómo su arte es vista como un fenómeno político; a continuación, se habla del terremoto de Sichuan a través de los ojos del arte; a su vez, se expresa el cómo Ai WeiWei se compromete con la situación actual por medio del arte para la comunidad y el activismo, y para finalizar, pero no menos importante, las conclusiones.

Palabras Claves: Activismo, el arte como fenómeno político, crisis humanitaria

 

Februar 2018

El arte como fenómeno político: una mirada a la obra de Ai WeiWei

 

get pdf: El arte como fenómeno político

 

Introducción

By Jindřich Nosek (NoJin) (Own work) [CC BY-SA 4.0 (https://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0)], via Wikimedia Commons

Como se relata en el libro Ai Weiwei Speaks: with Hans Ulrich Obrist, Ai WeiWei es un artista, diseñador, arquitecto, curador, poeta, bloguero y publicista chino, nacido en 1957, hijo del poeta Ai Qing, quien es recordado como uno de los más grandes poetas modernos chinos, pero también como uno de los detenidos por Mao Zedong en Xinjiang por ser anti-comunista. Más tarde, WeiWei aprendería a dibujar gracias a los amigos de su padre, convirtiéndose desde entonces en una práctica diaria.

Después de varios viajes de exploración en Estados Unidos, Filipinas y sus visitas a Berkeley, Weiwei se convirtió en amigo del aclamado poeta Allen Ginsberg, emergiéndose así en la escena artística, descubriendo entonces la multicitada de materiales posibles a usarse en un trabajo artístico; y empezando a capturar cuestiones políticas por medio de la fotografía.

Después de la muerte de su padre en 1996, Ai WeiWei refleja a través de sus obras la situación que se vivía en China, tal como la tensión entre la cultura tradicional y moderna china; a su vez, expresa y cuestiona la inexistencia de las instituciones contemporáneas en China, lo cual causa que WeiWei se torne en activista, al manifestar por medio del arte vanguardista en China, tal como la plasman su publicación the Black, White and Grey Books, fundando así el primer espacio alternativo de arte en China.

Adicionalmente, WeiWei construyo su propio estudio, inspirado en la casa del filósofo Ludwig Wittgenstein, y aclamado por la singularidad de las simples estructuras y materiales; para luego consolidarse como uno de los más famosos arquitectos chinos con la construcción del estadio olímpico Meuron en Beijing.

En 2006, Ai WeiWei comenzó su blog, convirtiéndose en un recurrente diario de expresión, con múltiples publicaciones de fotos, y obras de arte, siendo visitado por más de 100.000 personas diariamente. A través de su blog, logro demostrar que la documentación diaria por medio de las redes sociales puede ser un creativo acto de resistencia al gobierno, en vez de un acto pasivo para recordar lo que se vivencia en China. (WeiWei, 2011)

 

El arte como fenómeno político

Tal como Chantal Mouffe interpreta, la política es el conjunto de discursos y prácticas, institucionales e inclusive artísticas, que contribuyen y reproducen un cierto orden; aunque la política se relacione con las ideas de Gramsci de sentido común dominante y hegemonía, que hacen referencia respectivamente al sentido común impuesto por las clases dominantes y el proceso de dominación social, que se torna en el reconocimiento de los intereses de las clases dominantes como propios en las clases subalternas. Estas se logran relacionar con las obras de Ai WeiWei a través del referente a un grupo dominante, y la lucha por la hegemonía como una disputa por la administración del sentido común, que da una aparición a la concepción del mundo como las más válida y conveniente para el pueblo en general, y no un grupo dominante.

“La política es siempre establecer, reproducir o destruir la hegemonía, que a su vez está siempre relacionada con el potencial de un orden contra hegemónico y desde ese concepto la cultura y el arte son constituidos como identidad. Donde él individuo puede hacer la distinción de arte política o no, y donde cada forma de práctica artística contribuye a la reproducción o destrucción del sentido común, hace que cada forma de arte contenga una dimensión política” (Chantal Mouffe, 2001).

A su vez, se discute la cuestión de si toda arte es revolución, a través de la actuación global y el cambio social, que Jessica Litwak ejemplifica a través del teatro. Pero es en la evaluación de la teoría y la descripción de las prácticas necesarias para enunciar la confluencia de numerosos aspectos del arte como activismo de Litwak que llega tener gran conexión con las obras de WeiWei e inclusive los autores previamente mencionados. (Litwak, 2017)

Además de Verónica Conte, quien en su escrito “Tiranía: Color y arte en el camino a la utopía”, en el cual uso el activismo del color para explicar el arte como forma de activismo y como este puede generar un cambio social e inclusive la aspiración a la revolución. (Conte, 2016) El cual puede ser una expresión más del arte de WeiWei y su deseo de llevar un mensaje de libertad, equidad y respeto por los derechos humanos en repetidas ocasiones en sus obras como una forma de generar un cambio social, y es entonces, que todo arte contiene una dimensión política, en el sentido de que todo arte tiene lugar en el ámbito público y se compromete con una ideología ya existente. Sin embargo, hay ocasiones en las que el arte se vuelve arriesgadamente político, tanto para el artista como para los espectadores que se involucran con él, lo que parece ser el caso Ai Weiwei.

 

El terremoto en Sichuan

El 12 de mayo del 2008, China y el mundo se sacudió con el estremecedor caso del terremoto magnitud 8 en el condado de Wenchuan que dejo cientos de miles de heridos, y millones de personas sin hogar, que genero una rápida y acogedora respuesta de los internautas, lo que llevo a una reacción de emergencia entre el gobierno y la sociedad China.

Los devastadores resultados, generaron un gran impacto e interés para Ai WeiWei quien plasmaría su opinión crítica a través de diferentes expresiones artísticas, dándole así una ideología, y una dimensión política.

La Campaña Remembrance fue la primera muestra de su inconformidad por este estremecedor caso. El artista lidero una conmemoración de los estudiantes difuntos a través de Twitter el 24 de abril del 2010, en el cual 3444 participantes de la red social compartieron grabaciones de voz con los nombres de los 5205 fallecidos, recitados 12140 veces. Por medio de esta campaña se buscaba expresar la indignación por el supuesto encubrimiento de las fallas arquitectónicas, que conllevaron a la pérdida de vidas inocentes, y lamentablemente, en la mayoría de los casos, en instalaciones escolares que se derrumbaron durante el terremoto.

Es tal el impacto del terremoto, y de los efectos posteriores a este, que causaron que WeiWei continuará con una serie de expresiones artísticas para expresar su indignación, delatar las supuestas causas del alto número de víctimas, y plasmar un desconcierto generalizado.

Por lo que, Ai WeiWei decide entonces empezar una investigación para argumentar que la corrupción y limitada construcción podrían ser las causas tras la muerte de estudiantes durante el terremoto, y plasma todo su proceso en el documental Never Sorry (WeiWei, 2009) donde se denota la visible tensión entre el uso de la fuerza policial y la vulnerabilidad de derechos humanos durante la investigación.

La expresión de descontento de WeiWei se hizo perene en su obra Remembering, que puede observarse en la parte superior del texto. Esta es una obra artística de 10 por 100 m creada con 9000 mochilas, cada una representando una vida de un niño (a) perdida en el terremoto de Sichuan. Utilizando cinco colores distintos, resplandecientes y vibrantes que reflejan la psique de un niño, su alegría tanto como su inocencia (de hecho, son los mismos colores utilizados para Toys R Us Logo); y que anteponen la oración “Durante siete años vivió felizmente en esta tierra” en caracteres chinos, y que relata la frase que una de las madres afectadas utilizo para conmemorar a su hija.

En palabras de Ai Weiwei,

“la idea de usar mochilas vino de mi visita a Sichuan, después del terremoto de mayo de 2008. Durante el terremoto, muchas escuelas colapsaron. Miles de estudiantes jóvenes perdieron la vida, y se podían ver bolsas y material de estudio en todas partes. Entonces me di cuenta de que la vida individual, los medios de comunicación y las vidas de los estudiantes estaban sirviendo para propósitos muy diferentes. Las vidas de los estudiantes desaparecieron dentro de la propaganda estatal, y muy pronto todo el mundo se olvidará de todo.” (WeiWei, 2009)

Esta obra, buscar ir más allá de plasmar sentimientos y vidas, busca trascender realizando una crítica al Occidente; y como ha sido un recurrente en las obras de WeiWei, el cuestionar la veracidad en los derechos humanos para esta parte del mundo y la supuesta protección de estos en una escala universal. Es además un cuestionamiento a las cifras dadas por el gobierno chino de los heridos y muertos en el terremoto, lo que conlleva a una dimensión política y una profunda critica a concepciones elementales, como lo son la veracidad y soberanía de un gobierno.

 

Obra Sunflower Seeds

Ai WeiWei ha logrado crear una obra que inicialmente llenó el Turbine Hall con una gruesa capa de semillas de girasol artesanales en porcelana, un total de 100.000.000 semillas, con un peso total de 150 toneladas.

Sunflower Seeds es tal vez una de sus obras más destacadas, esta tuvo un proceso riguroso, donde se utilizaron cáscaras de semillas de girasol, hechas a mano en porcelana intricada, cada una fue esculpida y pintada por 1600 o más trabajadores, y exigieron una producción de 30 etapas. Lo que es diferente de la producción industrial de hoy en día, y es más un esfuerzo de cientos de manos expertas.

Dicha obre, llevo a emplear casi toda la ciudad de Jingdezhen; y convirtió de esta obra una expresión tradicional de técnicas de porcelana, ya que el pueblo entero hizo porcelanas, en su momento, para la corte del emperador por generaciones, refinando así la forma de un cuenco o jarrón y haciéndolo un lenguaje muy fino. Adicional a esto, hubo una preparación previa de 5 o 6 años para estudiar las posibilidades de emplear la antigua técnica para reconciliarla a un lenguaje contemporáneo de arte.

Pues bien, este factor histórico transciende los fines emblemáticos, al cuestionar el fenómeno “Made in China” de la geopolítica actual, de los factores culturales y del intercambio económico, para plasmar cuestiones de impacto global. Es por esto que Ai WeWei busca que “el arte sea una herramienta para la creación de nuevas preguntas, para crear la estructura básica, que se puede estar abierto a las posibilidades, es la parte más interesante de mi trabajo. Quiero que la gente que no entienda el arte, entienda lo que estoy haciendo”, dijo Ai Weiwei para TATE (2010).

“La práctica fundamental de Ai utiliza difíciles elementos en su propia vida y arte, como piezas de arena, que permiten al público conocer su trabajo en un significado más amplio. Él es impulsado por un deseo de indagar por información para fomentar tanto la libertad de pensamiento como la fuerza para actuar, ya sea en la cara de la represión política y la censura o las nuevas amenazas, tal como la expresión individual, el materialismo e incluso la producción en masa. A su vez, en una de sus obras más reconocidas Sunflower Seeds expresó la responsabilidad que siente de articular y promover la lucha por la libertad; y su creencia en las posibilidades de transformación para y con la sociedad.” (Jervis, 2011).

Las semillas de girasol de Ai Weiwei han sido expuestas en varias versiones en 12 galerías de 11 ciudades, 9 países desde 2009 y se han presentado como “semillas de esperanza”, una obra de “profecía parcial, amenaza parcial”, una instalación intrigantemente “contemplativa y mordaz”, La Fundación Faurschou ha tenido el honor de mostrar “Trigo de Girasol” tres veces en sus espacios de Beijing y Copenhague.

Cuando Ai Weiwei, (Chris, 2011) habla de la importancia del arte en el marco del cambio social y político, como una necesidad para mejorar las condiciones de los derechos humanos de los ciudadanos, pues sin estas, se permite a China el no llegar a ser una sociedad moderna. En ese sentido, WeiWei está reconociendo el vínculo entre el arte con la política y en el que lleva a que muchas de sus obras relaten asuntos de actualidad y lleven a cuestionamiento de los sucesos.

 

En su Documental Ai WeiWei: Never Sorry

En su Documental Ai WeiWei: Never Sorry dirigido por Alyson Klayman, WeiWei cuenta la historia interior como un disidente de la era digital, que pretende inspirar a las audiencias globales y desdibujar las fronteres del arte y la politica como fenomenos apartados. Es un retrato detallado de la exploración de una china contemporánea y Ai WeiWei como una de las figuras públicas más atractivas.

Este filme relata la importancia de trascender el miedo, y crear contenidos que transciendan la esfera de lo correcto, para ligar el arte a una dimensión política que conlleve, mediante este, un mensaje; siendo este un caso en el que el arte se atreve a cuestionar la autoridad, filtrar la información recibida y relatar historias de fortaleza.

 

Campaña Remembrance: Expresión de la crisis Humanitaria

Uno de los actos más controversiales de Ai Weiwei ha sido el integrar los inmigrantes por una serie de expresiones artísticas en la que expresa una crisis humanitaria y cuestiona las acciones, las partes, los relatos, la información de una situación que parece estar lejos de ser contenida.

Cuando los refugiados sirios, afganos e iraquíes fueron sacados a punta de golpes y lacrimógenas por la policía del campo de inmigrantes de Idomeni, en la frontera de Grecia y Macedonia, Ai Weiwei recogió la poca ropa que tenían y dejaron tirada tras escapar, y con esta armó una colosal lavandería en la galería Deitch.

Esta obra es exhibida en la galería del SoHom, en donde se instaló 2046 pantalones, faldas, camisas y chalecos de niños inmigrantes, que mando a lavar, planchar y doblar.

Este dijo para el New York Times

“Crecí en condiciones similares a la de los refugiados…me hubiera gustado ponerme los zapatos usados de mi hermano. Siempre eran demasiado grandes, pero los hubiera usado. Cualquier cosa es mejor que no tener zapatos. Mi padre utilizó su corbata como cinturón porque no tenía nada para amarrarse los pantalones. Cuando hacía trabajos forzados en el invierno, usaba su corbata para envolverse un pie porque no tenía calcetines”. (Wines, 2010)

Por otro parte, en 2016 decidió cerrar su exposición Ruptures en Copenhague, en el Museo de Aros, en protesta por las nuevas leyes de asilo danesas, que permitían la confiscación de bienes de los refugiados, entre otras cosas; la cual pretendía costear la estancia de los inmigrantes, como un acto de solidaridad con los inmigrantes y un acto de discordancia con las nuevas leyes danesas.

La Faurschou Foundation anunció “Ai Weiwei ha decidido cerrar su exposición Ruptures, decisión que lamentamos y respaldamos, puesto que el Parlamento danés ha elegido colocarse al frente de políticas simbólicas e inhumanas ante la mayor crisis humanitaria de la actualidad, en Europa y en Oriente Medio”, haciendo así claro su apoyo a la decisión tomada por WeiWei y las razones de este para cuestionar la crisis humanitaria que se vive en el momento.

Continuando con su expresión de descontento hacia la crisis humanitaria, en enero del 2016 WeiWei decide cubrir Praga con mantas térmicas doradas como una forma de protesta al sufrimiento de los refugiados en su camino a Europa, llamándola Cabezas del Zodiaco; la cual precederá a su siguiente instalación de cientos de chalecos en las columnas de la Konzerthaus en Berlín.

Así pues, coloca chalecos salvavidas de refugiados sirios en Berlín, que forman 201 flores de loto en forma de F en el estanque del Palacio Belvedere de Viena; con esta obra de arte, WeiWei pretende remover conciencias sobre la crisis humanitaria a la cual nos estamos enfrentando, y recordar a todos lo que los chalecos tirados en la playa de la Isla griega de Lesbos representan.

Como se puede denotar, la política hace parte del arte de Ai WeiWei, vinculando el sufriente de los inmigrantes con experiencias personales, y cercanas, además de una profunda critica a la intervención de la comunidad internacional y el escaso apoyo a la crisis humanitaria que enfrentamos, lo que compromete a WeiWei con la situación actual por medio del arte para la comunidad y el activismo.

 

Conclusiones

Parece que la ‘revolución’ siempre viene acompañada de la controversia, pero en el caso de Ai Weiwei, es cuestionable y controversial el saber cuánto de su arte lo convierte en un revolucionario o si, por el contrario, gracias a esta, pueda ser descrito como activista.

Ai Weiwei tiende a comunicar a través de su arte los temas críticos y globales del siglo XXI, la relación entre la tradición, la modernidad, el papel de un individuo y el estado, a través de las cuestiones de derechos humanos, la libertad de expresión; y la defensa de los principios de la justicia y la decencia común que recaen en las personas comunes.

Por otro lado, es cuestionable la reacción de Occidente hacia la violación de derechos humanos que se vive en la crisis humanitaria y la situación política en la que el recaudo de dinero prevalece sobre el servicio al pueblo, además del dinero que reciben o hacen gracias a China, quien ha sacrificio derechos y libertades de sus ciudadanos, lo que solo lo hace la situación peor para los ciudadanos chinos y su acceso a una vida justa y digna.

Es visible la intervención de WeiWei; porque su arte es para la comunidad y en esa medida, este termina tornándose en un activista de los derechos de expresión, de protección, tanto por parte del estado como de la comunidad internacionales, de información certera, de no corrupción, y en su totalidad de derechos humanos, que en sus obras se refleja en la apelación por la intervención, la anulación y/o el desconocimiento de estos derechos a los ciudadanos del mundo.

A su vez, es desconcertante ver la opresión que el gobierno Chino ejerce sobre sus ciudadanos, cuando de libertades de expresión se habla, puede hasta vislumbrarse en el caso de WeiWei que diferir con el gobierno puede generar un llamado de atención de las fuerzas policiales sobre aquel que se atreva a diferir, y casi que inclusive una vigilancia parcial de sus acciones y divulgaciones. Pues bien se puede hacer referencia a su documental Never Sorry, donde el abuso y la vigilancia de la fuerza policial se vislumbran con claridad, e inclusive, llega a ser cuestionable las razones por las que la policía china interviene en el proceso de creación de WeiWei, la intrusión en sus instalaciones, e interrogar y encarcelar a las personas cercanas a este, lo que sólo genera que el miedo generalizado continúe, por miedo a repercusiones a sus allegados, y termine por derrocar los esfuerzos de WeiWei por generar voluntades de cuestionamiento a lo impuesto.

Además de todo lo nombrado anteriormente, se puede concluir que las obras de WeiWei transciende los espacios de arte, para colisionar con los de la política internacional, y cuando hablamos de política internacional nos referimos en su mayoría a la veracidad de los derechos humanos en Occidente y la supuesta protección en una escala universal; y si bien colisionan es porque estos generan un impacto no sólo en los medios de comunicación (que de por sí ya conlleva una gran ola de consecuencias) sino también en todos aquellos que se ven impactos de alguna forma por sus obras, con llevando así a tomar acciones; ya sea comenzando a cuestionar y filtrar toda aquella información, que muchas veces se da por certera, o por iniciar un activismo propio entorno algún tema tratado en sus obras, o en atreverse a generar espacios amenos a discusión y generar un entorno de equidad, cumplimiento de deberes y derechos públicos. Así pues finalizaría, asegurando que lo que WeiWei logra a través de su arte, no es más que una forma de activismo creativo, que llega a impactar de una forma única a todo aquel que guste de sus obras artísticas.

 

Referencias

Chantal Mouffe, R. D. (2001). Greey Room 2. In R. D. Chantal Mouffe, Chantal Mouffe, Rosalyn Deutsche, Branden W. Joseph, Thomas Keenan (pp. 98- 125). Winter.

Conte, V. (2016). Tirania: Color y arte en el camino a la utopía . In M. S. Maria do Rosário Monteiro, Utopia(s) – Worlds and Frontiers of the Imaginary (p. 418). Lisboa: CRC Press.

JITASG. (2016, Abril 30). Múnichparallevar / münchenzummitnehmen. Retrieved from Múnichparallevar / münchenzummitnehmen: https://munichparallevar.wordpress.com/2016/04/30/el-paso-de-ai-weiwei- por-munich/

Litwak, J. (2017, Junio 28). Universidad Pedagogica Nacional . Retrieved from Universidad Pedagogica Nacional : http://revistas.pedagogica.edu.co/index.php/revistafba/article/view/4402

Macdiarmid, P. (2010, Octubre 18). New York Times. Retrieved from New York Times: http://www.nytimes.com/2010/10/19/arts/design/19sunflower.html

WeiWei, A. (2009). Ai WeiWei. Retrieved from Ai WeiWei: http://aiweiwei.com/documentaries/so-sorry/index.html

(Joshva), X. L. (2010). The Power of Chinese Netizens After the Earthquake. Forbes, 15-25.

Tate. (2010, octuber 14). Ai Weiwei: Sunflower Seeds. Ai Weiwei: Sunflower Seeds. San Francisco , Califronia, Estados Unidos : TATE.

 

 

 

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Posted by Carolina Orduz Gómez

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